Por: nuevodebatecuba
Hace 3 años, un 17 de diciembre el mundo se levantaba atónito ante la noticia de que dos pares históricamente irreconciliables, -y antagónicos tanto en la práctica como en el imaginario colectivo internacional- salieran a la luz pública y anunciasen un “proceso de normalización de relaciones”: la Cuba de los Castro y los Estados Unidos de Obama.
Todo ello ocurría un 17 de diciembre, lo cual bastaba para sumarle al impactante hecho connotaciones mágico-religiosas a nivel popular en Cuba, pues el día coincidía con la festividad de San Lázaro, “el santo de los milagros y las dádivas generosas en problemas de salud incurables” y de “respuesta certera” a plegarias de prosperidad personal y familiar luego del cabal cumplimiento de las promesas por parte de sus fieles. Sigue leyendo