Por María Antonia García Alonso
Disidentes cubanos acudieron este jueves 5 de febrero ante el Congreso de Estados Unidos para denunciar los abusos contra los derechos humanos por parte del gobierno de Raúl Castro y pronunciarse sobre todo en contra del restablecimiento de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Un verdaro síndrome de la decadencia y el odio. Ellos son solo asalariados de la extrema derecha de Miami que a nadie les extrañe, ellos no son genuinos, ni mucho elegidos por nadie.
Todo ha sido una ridícula actuación, apoyada y alimentada por el senador Marco Rubio en pleno declive y deterioro. Este personaje es Presidente del Subcomité Senatorial de Relaciones Exteriores para el Hemisferio Occidental. Rubio acaba de hacer su primera audiencia congresional, evidenciando el síndrome de la decadencia y el odio. No faltó por su puesto la actuación nefasta de la Congresista Republicana por la Florida Ileana Ros-Lehtinen (R), con igual síntomas de deterioro.