Por Fernando Ravsberg
El establecimiento de rutas marítimas entre EEUU y Cuba parece factible, cuenta con el visto bueno de los dos gobiernos y el interés explícito de varias navieras. De concretarse, los precios de los pasajes y del transporte de mercancías podrían bajar sustancialmente.
Reflotar el ferry que unía a los dos países antes del triunfo revolucionario parecía, hasta el 17 de diciembre, una utopía. Sin embargo, con el giro que han dado las relaciones, ahora resulta un vínculo lógico dado el tráfico que se espera en el estrecho de La Florida. Sigue leyendo