LA HABANA
La visita del papa Francisco a Cuba acentúa la política de diálogo que la Iglesia fomenta actualmente, aseguró el cardenal Jaime Ortega, quien además lamentó recientes críticas de opositores a su persona por rechazar que existen presos políticos en la isla.
Ortega, el sacerdote con más alta jerarquía en la isla indicó que ya se están haciendo los preparativos para la gira pontificia que se desarrollará en la isla a partir del 19 de septiembre y que seguirá hacia Estados Unidos.
La visita «tiene un profundo mensaje pastoral y un sentido muy específico de acentuar el espíritu de diálogo en la iglesia y fuera de la iglesia», expresó Ortega.
Ortega participo el sábado de una ceremonia para imponer una medalla enviada por el Papa Francisco al portavoz del arzobispado, Orlando Márquez, uno de los laicos más connotados de la isla.
«El papa elogió mucho al diálogo entre Cuba y Estados Unidos. y acentuó esto de que se podrían resolver los problemas de manera muy diplomática y evitando confrontaciones y violencias», agregó el prelado.
Washington y La Habana anunciaron en diciembre pasado que se iniciaría un proceso de normalización diplomática y de relaciones; mientras agradecieron a Francisco por su rol de facilitador, que desarrolló en secreto durante más de un año.
Ortega salió además al cruce de las críticas que la semana pasada le propinaron opositores cubanos por decir que no había presos políticos en la isla.
Según Ortega la cita fue sacada de su contexto.
«Creo que todo esto se mueve siempre cuando va a haber una visita del papa a Cuba», comentó Ortega.
Algunos se muestran satisfechos por la presencia del pontífice, indicó el prelado, pero otros «se sienten mal ante la visita del papa y les parece que tiene connotaciones políticas»
«Yo hablaba (durante la entrevista) de que cuando vino el papa Benedicto el gobierno dio un indulto grande para los presos, y me preguntan ‘políticos’ y le respondo eran presos comunes, ya de aquellos no había», explicó Ortega en relación a los disidentes del grupo de los 75 excarcelados tras las gestiones de la iglesia.
En 2011, gracias a la mediación de Ortega, medio centenar de presos de la redada del 2002 -75 opositores en total- quedaron en libertad, sumándose a los otros que habían sido excarcelados paulatinamente por el gobierno.
La Comisión de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, una organización no gubernamental, inform el viernes que había 60 presos politicos, algunos por realizar actos violentos y otros con delitos con motivaciones personales.
La Comisión los consideró todos políticos por haber recibido un procesamiento de la policía dedicada a la Seguridad del Estado y ser considerados contrarrevolucionarios, sin juzgar su método.
«Es tan difícil la interpretación de qué es preso político, uno dice es, otro dice no es», expresó Ortega. «Yo realmente no los conozco».
Ortega indicó además que los obispos de la isla están recibiendo centenares de cartas de gente que solicita que la iglesia les gestione indultos con la visita del Papa Francisco.
«Ni una (de las cartas) indica delitos políticos. sí hay muchos delitos económicos», comentó el cardenal.