Por María Antonia García Alonso
En días recientes fueron publicados varios artículos en diferentes medios de comunicación, donde se hacía referencia al estudio realizado vía telefónica por Inter-American Security Watch con una muestra de 304 probables votantes específicamente dentro de la comunidad cubano-americana, a los cuáles se les preguntó sobre el apoyo de la misma al restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y los Estados Unidos. Resultado: un poco más de la mitad, el 53,9% dijo oponerse a la política de Obama hacia Cuba, frente a un 25,7% que dijo ser favorable. Nada más lejos de la verdad que se pretende ocultar y manipular a toda costa.
La encuestadora Inter-American Security Watch es simpatizante del Partido Republicano y de su ala más conservadora, como se sabe opuesto abiertamente al proceso de diálogo que han venido efectuando en los últimos meses Cuba y Estados Unidos desde el anuncio de Obama el pasado 17 de diciembre de cambiar el rumbo de la política hacia la isla. Inter- Inter-American Security Watch es presidida nada más y nada menos que por Roger Noriega.
Quién es Noriega?
Noriega, es amigos lectores de nuevodebatecuba uno de los gestores de la Ley Helms-Burton, una ley extraterritorial que ha sido condenada por muchos. Este personaje fue clave en la administración Bush, cuya identidad se define por sus posiciones injerencistas y hostiles hacia Argentina, Venezuela y Cuba. Esta es la verdad y la esencia de estas artimañas y manipulaciones mal intencionadas.
Esta encuesta no demuestra la realidad manifestada en otras realizadas en los últimos meses sobre el mismo tema. Ella contradice a las encuestas anteriores llevadas a cabo por prestigiosas instituciones, la FIU por ejemplo ha realizado varias cuyos resultados arrojaron 68% de respaldo al restablecimiento de las relaciones Cuba-Estados Unidos, un 52% de rechazo al embargo, un 76% de respaldo a que se amplíen los negocios con Cuba y el 70% de apoyo a que se incremente la venta de medicinas y alimentos. Así tenemos también la encuesta realizada por Zogby Analytics que mostró también resultados favorables a las relaciones, 56% de los cubano-americanos y 75% de los hispanos.
Según una encuesta encargada por Msnbc/Telemundo, el 59% de los estadounidenses, que incluye un 56% por ciento de hispanos, aprueba el reciente cambio de política de Estados Unidos hacia Cuba. Este tipo de sondeo se realiza por lo general para medir el pulso de los hispanos en Estados Unidos y cómo se comparan los resultados con el resto de la población. El motivo de la encuesta fue también la celebración de la VII Cumbre de las Américas en Panamá, donde se espera se reúnan los presidentes de 34 países del hemisferio, entre ellos los de Cuba y Venezuela en quienes está concentrada la mayor atención, además del probable diálogo entre Raúl Castro y Barak Obama.
Ayer 8 de abril el Universal de Venezuela publica un artículo en que refiere que: El 59% de los encuestados dijo estar de acuerdo con que se repongan las relaciones entre Estados Unidos y la isla de régimen comunista, rotas hace más de medio siglo, mientras que un 26% se mostró en contra y un 15% no supo, indicó el sondeo del Marist College encargado por las cadenas Telemundo y MSNBC, según AFP.
Observamos entonces a raíz de la objetividad de los resultados de firmas encuestadoras de reconocido nivel de credibilidad, la manipulación de lo datos ofrecidos por Inter-American Security Watch que no arrojan la posición real del apoyo mayoritario de la comunidad cubano-americana al restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países vecinos que delinearán el camino hacia la verdadera normalización. La comunidad cubano-americana de igual manera aplaude la participación de Cuba en la Cumbre de las Américas, reclamo unánime de todos los países latinoamericanos y caribeños. Hoy el contexto es otro y no se puede negar. Existe una tendencia irreversible de apoyo al diálogo respetuoso y profesional entre los gobiernos de Cuba y Estados Unidos, existe la voluntad de avanzar a pesar de las diferencias y se ha avanzado en ese proceso que le duele a los sectores más recalcitrantes de la ultraderecha de Miami.
Es que la manipulación y la mentira de Inter-American Security Watch son muy evidentes.