Por Ernesto Londoño
Los estudiantes de Estados Unidos en un intercambio cultural que plantea en la Universidad de La Habana el 29 de noviembre de 2014. CréditoAlejandro / European Pressphoto Agency Ernesto
LA HABANA – De acuerdo con mi tarjeta de embarque, me llegó a La Habana en un vuelo de American Airlines 9470. La tripulación que me voló aquí vestía uniformes de la aerolínea y el avión pertenece a la compañía.
Pero técnicamente, con el fin de cumplir con las sanciones de Estados Unidos impone a Cuba, con sede en Miami ABC Charters operado mi vuelo. Es una de varias compañías del embargo compatible que se benefician de un auge de los viajes a Cuba.
Mientras viaja a Cuba para el turismo sigue siendo técnicamente ilegal para los estadounidenses, reglas aflojado por el gobierno de Obama ahora permiten una mayor variedad de los llamados intercambios culturales «pueblo a pueblo». Entre ellos se incluyen excursiones para los coleccionistas de arte, aficionados del tabaco y los estadounidenses que deseen explorar la escena gay dinámica de Cuba, por nombrar sólo algunos.