LA HABANA. Un cambio en la política de Estados Unidos hacia Cuba parece estar sometida a una operación con pinzas. Una de las dos puntas es el trabajo de los lobbistas invirtiendo recursos favorables al cambio; la otra podemos llamarla “el lobby de la racionalidad” dedicado a fundamentar la necesidad de dicho cambio mediante encuentros “de nivel”, el análisis de tanques pensantes, encuestas, y las declaraciones de personalidades del universo económico y político. En fin, la tarea de enfrentar a los decisores de políticas a una realidad innegable: aislar a Cuba ha resultado un fracaso. ¿Evidencias? Del otoño pasado a la fecha raramente pasa una semana sin que el tema salga a flote.
Ahora un activo grupo de cubanos radicados en los Estados Unidos viajará a Washington durante la última semana de este mes (23 al 25 de junio) convocados por CAFE (Cuban Americans For Engagement).